El pueblo de la gobernación, en todas sus formas, categorías y partidos, están acostumbrados a organizar marchas y consejos de luto para conmemorar las ocasiones del Ahl al-Bayt (paz sea con ellos) durante todo el año, incluido el séptimo día para conmemorar el martirio del Imam Hussein, su familia (la paz sea con ellos) y sus compañeros justos.
La procesión partió de la Puerta de Qibla del Imam Hussein (que la paz sea con él) hacia su patio sagrado, pasando por una plaza entre los dos santuarios sagrados y llegando al santuario de Aba al-Fadl al-Abbas (que la paz sea con él), donde se realizo un consejo de luto en su patio sagrado.
Durante su marcha, los dolientes cantaron palabras que encarnaban sentimientos de tristeza y dolor, mostrando hasta qué punto esta aflicción había afectado a las almas de los creyentes.